top of page
Search
RedacciĂłn

La grandeza de lo minĂșsculo 🐾



Si nunca has viajado al Sur de Venezuela, y te imaginas que todo es una selva en la que Tarzån, Chita y Jane cuelgan de unas lianas, no es exactamente así. La frontera con Brasil es enorme (mås de 2.000 km de longitud) y su biodiversidad también. A grandes rasgos y simplificando mucho: Amazonía y Guayana no son exactamente lo mismo, aunque solemos meterlo todo en un saco. La primera, mås al Suroeste, es la zona de tierras bajas y selvas lluviosas tropicales (en ocasiones inundables). En la segunda se intercalan grandes extensiones de sabanas con bosques y montañas. Entre ellos las estrellas en el paseo de la fama de Hollywood: los tepuyes.


Ya te lo deben haber dicho varias veces, pero el penthouse de los tepuyes propicia pequeños ecosistemas aislados —algunos parecidos incluso a los pĂĄramos merideños—, con especies Ășnicas. Por ejemplo, un sapito del Roraima que no salta ni nada, sino que rueda como una bolita (Oreophrynella quelchii). Obviamente, el espacio allĂĄ arriba en la azotea es reducido. Tampoco vas a encontrar un dinosaurio. Cuando un animal es menos grande o espectacular, es mĂĄs difĂ­cil divulgar entre el gran pĂșblico la importancia de preservarlo, como parte de un todo interconectado.


La grandeza de la naturaleza del sur no aguanta todo. Hay minería, caza, quemas, progresiva urbanización y deforestación. La Lista Roja de la Fauna Venezolana, con las dificultades del caso para actualizarla en un país con varias emergencias, sigue siendo nuestra referencia. De las 30 especies que aparecen en peligro crítico, al menos dos habitan cerca de la frontera con Brasil: la tortuga arrau (Podocnemis expansa), la mås grande del mundo entre las que viven en agua dulce, y el sapito rojo del Yapacana (Minyobates steyermarki). No hay peluches de ellas en las tiendas, pero ojalå nuestros nietos no las vean solo en museos virtuales. En nuestras redes sociales te daremos mås información sobre esta #Massinha.


Agradecimientos para los biólogos Enrique La Marca, Juan Carlos Amilibia y las ONG Provita y SOS Orinoco, en cuyos sitios web hay información mucho mås detallada.

12 views0 comments

Comentarios


bottom of page